Si es que no tengo perdón... hace más de una semana que volví de Valencia y todavía no he escrito nada...
Lo pasamos genial, todo el día de fiesta, y además J, A, L, S y S se llevaron el primer premio de la categoría de estudiantes por una campaña que hicieron. Me encantó la Ciudad de las Artes y las Ciencias, es espectacular.
Y me pasó una cosa que todavía no me la creo y que demuestra que todavía queda gente horada... Me recordó bastante a
la historia de
Victoria con una PDA.
El día que nos íbamos estaba terminando de hacer la maleta, y tenía varias cosas en la mesilla de noche: el cargador del movil, el cargador del ipod, los altavoces, el ipod... todo iba para la maleta menos el ipod que iba para el bolso, así que lo dejé un momento encima de la cama y metí todo lo demás en la maleta.
Cuando el tren empezó a andar fui a buscar el ipod para escuchar música en el viaje y el ipod no estaba... me iba a dar algo. Vacié el bolso entero, y el ipod no aparecía. Entonces me acordé de cuando estaba haciendo la maleta, y de que me había dejado el ipod encima de la cama del hostal...
S llamó corriendo para preguntarles, y le dijeron que todavía no habían entrado en la habitación, pero que iban a mirarlo. El tío fue, volvió y le dijo que sí, que estaba allí, que fuésemos a recogerlo cuando quisiéramos. Llamé a L, que es de Valencia, y me dijo que no me preocupara, que ella me lo recogía, y que justo el lunes tenía que ir a Madrid para hacer una entrevista de trabajo, así que quedamos y me lo dio.
Todavía no me lo creo, el del hostal podía haber dicho que no estaba allí y quedárselo, cosa que, por desgracia, es lo más normal...